viernes, 6 de julio de 2012

Perseo


Digamos que

me enfrenté a mi Kraken interior en batalla

Algo confusa la batalla, debo decir

Naturalmente no salí indemne

pero tenía que hacerlo

Era un pendiente

una deuda conmigo mismo

un glitch en mi vida

algo como lo que le pasaba al papá de Marty McFly en Back to the Future

Si no lo arreglaba, el resto de mi vida no podría estar bien porque

la otra vez

me acobardé

me confundí

estaba perdido en mis idas y vueltas

no estaba haciendo lo que yo quería

estaba haciendo lo que alguien más quería que hiciera

estaba corriendo, me estaba escondiendo

fui una mariquita completa la verdad

y lo resintió mi corazón

porque hasta ese momento mi vida había sido todo o nada

o todo

aunque me desintegrara en llamas pero bien vivido

o nada

y me quedaba conmigo mismo y mis convicciones

que al final de cuentas es todo...

Ninguna batalla puede terminar bien

pero de plano

qué hace uno cuando el mensaje no cruza al otro lado

(después de esa frase no recuerdo nada más... )

Y como habíamos comprobado que ocurre en situaciones in extremis

siempre nos mostramos tal y como somos

a veces mentimos

a veces salimos corriendo

a veces nos tragamos nuestras palabras

y dejamos que el miedo cambie nuestro curso de acción

Alguna vez hice cada cosa según el libreto pero

te quedás vacío

seguís construyendo... pero los cimientos son de arena...

caminando sobre cáscaras de huevo...

con Parkinson en el alma

Atado, rígido, anhelando libertad de movimiento

sin morir y sin vivir... sólo dejando pasar los días...

Quién puede estar así?

yo no...



Ha de ser porque me las llevo de Superman...

o de Batfink...

*