viernes, 13 de marzo de 2015

Este tipo sabe lo que dice


¿De qué sirve seguir luchando, si ya se perdió la guerra o si la lucha es indigna?

Es más adaptativo reemplazar la resignación negativa (aguantar y tolerar) por una resignación positiva: “Ya no hay nada que hacer. ¡Qué alivio!”.

Walter Riso

*