La chica oculista que hace los exámenes de la visión de parte del seguro colectivo vino hoy a la oficina. Se instaló en una salita de reuniones y cada uno de nosotros fue pasando para la revisión de ojos. Todos regresaban sospechosamente muy sonrientes, lo que me causó mucha curiosidad. Luego me tocó a mí y me dirigí intrigado a la salita.
Toque la puerta. Pronto abrió la chica oculista: una rubia de 1.80, ojos azul-gris, con una bata de doctor cortita, una blusa con escote más pronunciado que la palabra "fútbol" en un mundial y una faldita más cortita aún que la bata. Estaba toda de blanco, como una enfermera salida del video de Miranda.
- En qué le puedo servir?
- Um... quiero saber qué me pasa...
- Por favor, pase adelante. Siéntese acá.
Muy judicialmente me tomó todos los datos de rigor. Luego me averiguó todo el historial clínico. Que si tenía diabetes, que si tenía cataratas, que si tenía dolores de cabeza, que si era impotente, etc. Que si mi papá tuvo cáncer, que si mi mamá tuvo enfisema, que si mi tía fue dispéptica, que si mi tío fue ruletero.
La respuesta siempre fue no. Hasta llegué a creer que estaba sano.
Luego me puso unos lentes muy gruesos con muchos numeritos alrededor, se agachó frente a mí para arreglarles la graduación y su escote quedó en mi visual, amplificado en el orden de las 5 dioptrías.
- Léame el cuadrito blanco que está frente a usted.
- "Lovable - Made in Guatemala" y hay una equis sobre una planchita muy pequeña.
Se volteó con desconcierto a comprobar el cartelito con letras en la pared del fondo. Yo le pregunté si no sería mejor que me quitara primero los lentes de contacto.
- Usa lentes? No puede ser! No es posible seguir con el examen!
- Con lo que me estaba gustando...
- Es necesario que se los quite por lo menos 24 horas para que el ojo recupere su esfericidad y este relajado. Vamos a tener que pasar a la segunda parte del examen.
- Bueno...
- Necesito una muestra de esperma suya en este frasco.
- ...!!!
Un poquito extrañado recibí el frasco que me ofrecía y leí la etiqueta: "Pachon mundialista Alemania 2006". La marquita de hasta arriba decía "600 ml".
Me alegre de que no fuera un oculista tradicional de aquellos gordos de la zona 1, porque si no me hubiera costado mucho.
En fin. Ahora estoy aquí, todo tembloroso y con sueño, pero quiero compartir con ustedes mis caros lectores (caros si, mantenerlos a ustedes 6 me saldría bastante costoso) estos momentos y bloguear en vivo y en directo estas 24 horas que no tendré lentes.
Empezaré pues, quitándome los lentes de contacto. Me los quito a la 1, a las 2 y a las...
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Lsdklsd ya em qyudl los ltbsl dc obntabct ty ahor francamente no puyefo ver abxii4nyndfx aw. Lq quyd mehftor puedo veyr es labnaarr esozcuadiora. Subb emnbargo el bbi tber kebtbes ne gax ¿sebtur nas kubre t realasndo de lo que uysteds dcreln
bwos vemos